Incertidumbres

Hoy he reflexionado en que estamos ocupados pensando en el virus, en que estamos esperando a que se acabe y todavía no hemos visto las consecuencias que este final puede tener.

Habrá personas que lo único que habrán perdido será su tiempo, pero otras muchas habrán  perdido a su madre, a su padre, a sus abuelos o a alguien que querían mucho, y no se habrán podido despedir de él.

A otras muchas les habrán reducido el sueldo y no tendrán para pagar las facturas de  la luz o el agua, que después de estar semanas sin salir, serán escandalosas.

Lo que quiero decir es que cuando esto se acabe no habrá únicamente felicidad y alegría como la mayoría de las personas están pensando.


La gente ha cambiado sus relaciones, que nadie salga a la calle y nadie pueda asociarse nos condiciona a todos provocando un aislamiento social donde ya no mantendremos la misma relación con nuestros amigos y familiares que no están en tu misma vivienda debido a que todo lo que hablaremos con ellos deberá de ser por las nuevas tecnologías porque no existe otro método . Este aislamiento a lo mejor los primeros días nos puede llegar a venir bien para desconectar y salir de nuestra zona de confort por unos instantes pero también nos puede causar cierta adiccion a las nuevas tecnologías. Con esto me refiero a que cuando estamos en estas situaciones en las que no mantenemos conexión con nuestros amigos y familiares, es muy normal que tendamos a llamarlos por lo menos una vez al día o mandarte con ellos mensajes para saber que tal están y sobre todo como están llevando todo esto. Sumándole a esto el exceso de información que nos mandan las noticias constantemente a nuestros teléfonos, televisiones o que oímos por la radio, nos sobrecarga y nos puede producir una acumulación constante de energía en el cerebro con la que todos podemos llegar a en vez de estar relajados en nuestra casa, con una sobrecarga de información que nos produzca un gran malestar
 
En estos dias todos estamos tratando de hacer cosas que nos entretengan. Tres cosas que creo que está haciendo mucha gente son: deporte, escuchar música y dibujar. Tres asignaturas que en el instituto son consideradas como "inferiores", a las que no se le dan apenas horas a la semana. Música, educación física y dibujo. Son ahora la mejor forma de mantener la salud mental. Escuchar música te ayuda a evadirte, solo por la de sentimientos que te puede transmitir una canción, o tocar un instrumento para sentirte bien. Hacer algo de ejercicio para así mantener tambien tu salud física, cuando en días "normales" seguramente ni lo harías. Está aportando muchos beneficios estos días a las personas que lo hacen, seguramente, si lo hiciéramos también normalmente, nos aportaría muchísimos más, pero cuando podemos hacer todo lo que queramos, no nos preocupamos por sentirnos bien de esas maneras, para nosotros es mucho mejor ir a lo fácil, preferimos salir y echarnos unas risas a intentar ser feliz de otras maneras. Por eso mismo creo que a estas tres cosas habria que darlas un lugar con mucha más importancia en los colegios e institutos ya que me parecen muy importantes
 
Las suposiciones y las noticias buscan avanzar cuanto antes el día concreto de la vuelta a la normalidad si embargo el gobierno, bastante previsor, prefiere ir anunciando sus plazos del estado de alarma progresivamente, de 15 días en 15 días. Esta liberación progresiva de noticias por parte del gobierno hace que aumente como he dicho antes el hambre y las ganas de conocer la fecha límite, pero me he dado cuenta que esa es la manera más eficiente ya que se atienen a un ``dogma´´ como es las características básicas de un estado de alarma y no se basan en especulaciones lo cual es muy inteligente para posicionarse en una fase de irresponsabilidad del fallo y de un logro en la victoria.

  Todo esto lleva a la conclusión de una sensación de desinformación por parte del gobierno hacia el pueblo el cual está ``paliando´´ la pandemia de la manera no más eficiente pero si la que podemos desarrollar con los límites de recursos y materiales establecidos.

Ya es sabido por todo el mundo que la cuarentena se alargará un par de semanas más, debido al número creciente de contagiados por coronavirus. Esto puede haber sucedido porque mucha gente no habrá cumplido las normas establecidas para la prevención del virus, y si bien durante la primera semana  de cuarentena no se ha conseguido que toda la población obedezca, dudo que prolongar su duración sea lo más adecuado teniendo en cuenta la actitud de la gente ante esta situación. Obviamente, todo esto se podía haber evitado si en un principio el 100% de los habitantes hubiesen cumplido las normas de la cuarentena, por el contrario ahora mucha gente tendrá verdaderos problemas porque serán incapaces de volver a sus trabajos lo antes posible o de asistir a algún evento importante. Sin embargo, pienso que esta situación no puede sostenerse económicamente mucho tiempo, y que el país requiere un número usual de recaudaciones (el cual se está viendo alterado por este acontecimiento) para evitar perecer.

Hoy se decidía que pasaría con nuestro curso, y por lo tanto, con una parte de nuestro futuro.

Estábamos en ascuas ya que no sabíamos si cortarían el curso en Marzo, algo que sería una locura, o bien, buscar otras opciones como podría ser realizar las clases que quedan de forma online.

Por otra parte no hay más observaciones así curiosas en cuanto al comportamiento de la gente, siempre están los 2 bandos en este tipo de cosas, los radicales que no salen ni para sacar  al perro (que no es nada ilógico) y los que salen aunque les cueste una multa que casi no pueda ni pagar, por el mero hecho de llevar la contraria a todo el mundo o reírse.

En conclusión, la gente empieza a estar demasiado aburrida dentro de su casa, aunque muchos sigan haciendo sus mismas obligaciones pero desde casa. Pero no sé por qué, en este tipo de casos la gente que ni si quiera salía, por no parecer distinto a los demás, dicen también que tienen muchísimas ganas de salir de sus casas.

He estado pensando en toda la gente que durante la cuarentena y en lo que dure este virus y creo que se les debe dar un reconocimiento mayor que el que se les está dando. Se están jugando su seguridad y sus vivas y la de sus familias para hacer un bien comunitario. Los médicos, limpiadores, transportistas, vendedores ambulantes y demás personas que están trabajando están trabajando horas extra. Sobre todo hay que pensar en los médicos que son los que más expuestos como se están jugando la vida. Tengo un amigo que su madre es médico y me cuenta que ya no está casi en casa y que cuando está, no suele juntarse mucho por si acaso. Por eso me gustaría que se le diese un reconocimiento mayor

 

Las calles están vacías, todo afuera de nuestras casas esta desierto y las personas permanecen en sus casas. Esta situación me causa mucha nostalgia, es genial que todas las personas estemos respetando no salir de casa salvo para necesidades básicas y es lo conveniente para todos pero cada día que abro la ventana, que salgo a mi patio a tomar aire, o simplemente me da por mirar que tal esta el día, soy incapaz de no tener esa sensación, ver todas y cada una de las calles que rodean a mi casa vacías me produce soledad, tristeza, como si estuviésemos en guerra y a la gente le diera miedo salir o como si ya no pudiésemos respirar el aire fresco y el resto de nuestras vidas tuviese lugar en nuestras casas. Por desgracia es la situación que hay ahora y no podemos combatirla de ninguna de las formas y mucho menos salir a las calles, soy verdaderamente consciente de que no hay que hacerlo, pero deseo que llegue ese día en el que todos podamos salir a dar un paseo, ir al parque o a visitar a esos familiares que extrañamos y que las calles se llenen de niños, jóvenes y abuelos , gente de todas las edades que recobre esa alegría que ahora nos están robando